El Prado abre sus nuevas salas de pintura del Románico al Renacimiento El Museo del Prado presenta hoy sus nuevas salas de pintura del Románico al Renacimiento, una iniciativa patrocinada por la Fundación AXA que se inscribe dentro del Plan de Actuación 2009-2012 que la pinacoteca inició el pasado año con la presentación del espacio dedicado a los retratos de los Borbones. Además, el pasado mes de octubre, la pinacoteca incorporó, también como parte del programa La colección. La otra ampliación, doce salas dedicadas a las colecciones del siglo XIX, donde por primera vez las obras de Sorolla y los maestros modernos se mostraban junto a los grandes maestros del pasado, y en el mes de marzo la nueva sala dedicada íntegramente a bocetos y pinturas de gabinete del siglo XVIII español. El trabajo de Moneo En esta ocasión, Rafael Moneo ha elaborado una intervención arquitectónica específica con el objetivo de mejorar el acceso y la contemplación de los históricos frescos pertenecientes al mundo alto-medieval de Santa Cruz de Maderuelo y San Baudelio de Berlanga. Los criterios de selección y exhibición de las obras se deben a Pilar Silva, jefa del Departamento de Pintura Española hasta 1500 y Flamenca hasta 1600, y Leticia Ruiz, jefa del Departamento de Pintura Española de 1500 a 1700. Gracias a su labor, las pinturas más antiguas del Museo del Prado recuperan su merecido lugar en la historia de las colecciones. Con estas salas, el Museo del Prado ofrece a sus visitantes un nuevo montaje de la Pintura española del Románico al Renacimiento dispuestas en el entorno de la denominada Rotonda Baja de Goya. El recorrido se inicia con la sala dedicada a la pintura románica (Sala 51C), que ofrece un nuevo aspecto que permite apreciar la calidad y singularidad de sus espléndidos ciclos de pintura mural del siglo XII. Se han restaurado las pinturas de la iglesia de la Vera Cruz de Maderuelo (Segovia), que muestra una nueva apariencia interior y exterior; asimismo, se han evocado los espacios interiores de la ermita mozárabe de San Baudelio de Berlanga (Soria), incluyendo la columna central y la tribuna del coro sobre arcos de herradura, y se ha recreado la disposición original de sus pinturas murales. Pintura de los siglos XIV y XV La Sala 50, dedicada a la pintura de los siglos XIV y XV, muestra la evolución de los retablos en esa época, desde el Retablo de San Cristóbal, de estilo gótico lineal, hasta el gran Retablo de la Virgen y San Francisco, de Nicolás Francés, ya dentro del gótico internacional de origen franco-borgoñón, pasando por el estilo ítalo gótico y sus manifestaciones en Aragón, el Retablo de San Juan Bautista y María Magdalena, de Jaime Serra, o en Castilla, con el Retablo del arzobispo don Sancho de Rojas. A través de la Rotonda Baja de Goya se accede a la Sala 51B, dedicada a la pintura del siglo XV, con obras de estilo internacional de hispanoflamenco, y presidida por Cristo bendiciendo de Fernando Gallego, pintor hispanoflamenco activo en Castilla en la segunda mitad del siglo XV. Dentro de la escuela castellana se muestran notables ejemplos de la producción de Juan de Sevilla y Juan Sánchez, mientras que la Corona de Aragón está representada, entre otros, por Guerau Gener o el flamenco Louis Alincbrot, establecido en Valencia a partir de 1439 y autor de un extraordinario Tríptico de la Crucifixión. Pintura flamenca en España La Sala 51A acoge una nutrida representación de obras que muestran la asimilación de la pintura flamenca en España, bien a través de artistas españoles que han estado en Flandes, bien a través de artistas foráneos instalados aquí, como pueden ser Diego de la Cruz o el Maestro de Sopetrán, o con las obras de pintores que no salieron de nuestras fronteras pero conocieron los avances técnicos e innovaciones flamencas. La sala está presidida por Santo Domingo de Silos (1474-77) con su marco de tracería original